Zombie...

(Qué conste que el título obedece a la canción que escucho al iniciar este post, cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia!)

Qué puedo decir?
Acabo de regresar de una larga caminata por la playa después de una rica sesión de lectura-cafecito-Ah Cacao. Hasta ahora me está cayendo el veinte que aquí es donde vivo, ya no es más un lugar de paso, paulatinamente se fue tatuando en mi piel y ahora estoy impregnada de océano, de viento, de verde, de vida. Hoy sonrio al sacar a pasear a Floyd, hoy me emociono al llegar a casa y encontrar que Micha está afuera esperando a que la deje entrar, hoy me topo con gente conocida a cada cinco minutos, hoy, como en las películas, camino sobre la quinta y desde los diferentes lugares (cafés, restaurantes, barecitos y demás antrejos faranduleros) observo como me lanzan una sonrisa, como me saludan a lo lejos y me cuestionan, a veces solo con la mirada, dónde estuve todo este tiempo? Respiro profundo y caigo en cuenta que estoy en casa.

Y a luego? ni puta idea...

Mejor transcribo algo bonito que escribí en el cafecito y luego les pongo unas pics que tuve a bien tomarle a mi abrevadero favorito.

Vives en el paraíso de la eclecticidad, te sientas en el café y el murmullo que escuchas a veces resulta incomprensible: distintas lenguas, diversos colores, rasgos faciales contrastantes. Todo gira y fluye a tu alrededor, de vez en vez distingues una conversación, adivinas una nacionalidad, adviertes una postura política, intuyes determinada ideología...
Es increible vivir en tan singular torre de Babel, Sodoma y Gomorra podrían compararse con Playa ahora mismo. El placer con todo y su all-inclusive te abraza, rodeado de hedónicos Narcisos que conviven unos con otros. Sirves mientras te sirven, atiendes en la medida que te atienden, te limitas a sonreír, a bailar, a beber, a besar, a pachequear, a coger... para qué hablar o sentir?
Al final la chica chilena que está sentada a tu lado se ha comunicado a casa, ha hablado con el "computador" y le ha deseado cariños mientras se peina y sonríe a la pequeña cámara que está frente a ella transmitiendo en vivo desde Playa del Carmen, México hasta Santiago de Chile.

Suerte...