Litros...

Entre otras cosas, este viaje me ha permitido comprobar que México es el patio trasero de gringolandia.

Durante mi estancia por tierras quintanaroenses van varias veces que veo a chavitos(as) extranjeros (10-14 años), especialmente gringos, en el desenfrene total: chupando, fumando, fuckiando... Y realmente me da mucho coraje darme cuenta que en este país todo está permitido, especialmente cuando los ingresos vía turismo están en juego.

Hoy fuimos a un barecito en la 5th av. llamado Litros, nada del otro mundo. Lo que me llamó la atención es que al llegar pedimos nuestras bebidas para llevar y nos dijeron que no podíamos sacarlas de lugar ya que el antro estaba desde hace algunas semanas vigilado por la policía, por lo tanto tenían que seguir al pie de la letra las restricciones referentes a la venta y el consumo de bebidas alcohólicas. Acto seguido una barbie teen (13 años aprox.) llegó en su BMW convertible con un grupo de puebertos y en seguida fue atendida por el mismo encargado que nos negó los tragos para llevar.

La neta, a mi me vale madres que haga esa chamaquita y todos los escuincles extranjeros que se ponen bien locos por acá, lo que me caga es que no sean parejos: si van a infringir la ley que lo hagan con todos, whatever.

Por otro lado nos urgía salir de ahí porque el H. municipio de Solidaridad, al cual pertenece Playa del Carmen, cumplía 12 años y en el palacio municipal había un concierto de Raul Diblasio para festejar dicho evento.

Cuando llegamos y después de dos litros de chela, mi vejiga estaba a punto de estallar, por suerte encontré un baño a tiempo, de no ser así me hubiera sucedido tremendo accidente! La música a cargo del argentino fue buena, no puedo negarlo. La raza estaba prendidona ya que nuestro "sencillito" amigo tocó puro éxito ranchero de dominio popular, cerró con una rola que acaba de componer por estos lares: Sonata Cancún.

De regreso a casa pasamos a un extra a comprar algunas cosas y cual es nuestra sorpresa que el mismísimo gobernador del Estado de Quintana Roo, don Félix Gonzàlez Canto y su distinguida esposa "Polli" se encontraban en el mini super. Chikitiwow!!!!

However, hoy me la pase bien entre aluxes y criaturas mayas...

Hip Hop?

Ahora resulta que la señorita "no bailo hasta que ya ando entonadona" disfrutó de una de las mejores veladas posibles en playas caribeñas.

Ayer por la noche, después de dos viajes relámpagos, uno a Cancún y otro Tulúm, la familia peluche decidió llamar a los amigos alemanes y pasar la noche del sábado en la playa.

A little background: El día del huracán, Federica (Karen) invitó a una amigaa del trabajo alemana a refugiarse con nosotros, la buena noticia es que venía acompañada de Emmanuel y Dominicque, su hermano y un amigo. Emma desde que lo vi me pareció gay, Dominicque, un poco tímido, pero con una melena dorada y unos ojos verdes hermosos! Como comenté anteriormente, esa noche tuvimos una pedita agradable, en la cual me percaté de que Domnicque no perdía oportnidad de hacerme la plática y resulto que el sexy germano estudiaba Psicología (así o más coincidencias?). Ahí quedó la cosa.

Anoche, bajo un cielo totalmente despejado con la luna en su máximo esplendor nos divertimos bailando al ritmo de hip hop y harta chela. Como a las 2 am. nos escapamos un rato del bullicio del antro y nos fuimos a caminar a la playa, lo único que puedo decir al respecto es wowwwww...

So... el hip hop rulea!!!

El recuento de los daños...

Hierva mala nunca muere y mucho menos se marchita con tanto puto calor que hace por aquí. Emily nos puso medio nerviosos, pero no paso de ahí. He de confesar que pensé que habría mucha más acción de la que hubo.

La noche del domingo mientras Emily se ponía punkie, aprovéchamos pa' ponernos una pedita rica con whiskey. Unos amigos alemanes de "la familia peluche" (así es cómo los llamo ahora), nos hicieron el honor de acompañarnos durante el huracán. El alcohol ayudó a relajarnos y el viento (270 Km/hr en promedio) nos hizo lo que el aire a Juárez, nada.

Estuvimos sin luz día y medio y se nos quemaban las habas por picarnos los ojos los unos a los otros, ya que no había nada más interesante que hacer. Lo resolvimos con una rica plàtica que sirvió de re-encuentro, algunos demonios salieron, namás porquitos!

Por todo lo demás las vacaciones parecen estar funcionando conforme a lo planeado.

Hace que siempre si...

...tenían razón. El huracán está a punto de tocar tierra aquí en Playa, viene directito hacia nosotros con vientos de más de 250 km/hr. Está cabrón! ya tapiamos las ventanas e hicimos todo lo humanamente posible para protegernos.

Lo que más me caga es estar a la expectativa: tener que esperar a que llegue esto, haga su desmadre y nos deje todos jodidos. Desde que llegué el viernes por la mañana el clima ha estado de maravilla, soleado, el cielo despejado, etc y aún a unas horas del chingadazo continúa asi. Eso hace más difícil el poder creer que pronto viene un desastre de proporciones enormes. So... a esperar.

Lo bueno de esto es que nos hemos unido más, ya no me siento tan desadaptada como ayer. Punto para Emily!

Emily...

Llevo apenas un día aquí y parece que han pasado mínimo tres. El tiempo sucede muy lento y más cuando estás a expensas de un seudo ogro (como Luis) y una cuñada a la que todavía no le tienes mucha confianza (Karen). Espero que pronto se pase está sensación medio incómoda.

Por otro lado, se avecina un huracán que amenaza con destruir las costas de la penínisula de Yucatán, entre ellas Playa del Carmen. La gente anda como loca, todo mundo va a la super por provisiones, las gasolinerias están hasta su madre, el tráfico (que se supone aquí no hay) se pone denso y la gente no respeta y te avienta el coche bien feo, -todo pareciera un plan maestro pa' que no extrañe el Df-. Se supone que el huracan tocará Playa el domingo por la noche, yo sigo pensando que no es para tanto, espero no equivocarme!!!!

El calor está de la chingada, hace que te sude hasta el tuétano. Pasar del agobiante calor a la refrescante brisa del aire acondicionado es un sueño hecho realidad, pero creo que afectará un poco mi garganta, de hecho ya lo estoy resintiendo.

Poniendo en una balanza las cosas, a pesar del calor, del huracán y de qe todavía no termino de adaptarme a mi nueva familia... prefiero mil veces esto que estar con mi mamá.